Caché (2005)
Un día cualquiera de un mes cualquiera de un año cualquiera, en una aldea gabachil cualquiera, François llega a casa de un amigo con una cinta de vídeo bajo el brazo.
-Bonjour Frédéric, comment ça va?
-Dame un segundo que coja la chaqueta y bajamos al videoclub.
-Ya he pasado yo de camino. He alquilado una película americana.
-¿Y eso? Detesto el cine americano. Y a los americanos, ¡qué demonios! (dice Frédéric entre risas)
-No podría estar más de acuerdo, sin embargo ésta no es del director americano al uso, tranquilo.
-Muy bien, pues rebobina la cinta mientras preparo una tortilla.
Transcurridos cinco minutos vuelven a reunirse en el salón frente a la televisión. Frédéric ejerce de maestro de ceremonias y procede a pulsar el internacional botón de "play".
-"Caguetega pegdida"... "Integuersante" secuencia inicial...
Dos hogas, perdón, dos horas después, comienzan a desfilar los títulos de crédito.
-Emmm...
Una vez la cinta ha terminado del todo, se ponen en marcha. Recogen la mesa, friegan los platos, sacan a pasear al perro e incluso al gato, y justo cuando los primeros rayos de sol del nuevo día asoman, Frédéric rompe el silencio que mantenían desde que finalizara la película.
-Así que el tipo aquel entra en la celda y luego...
François asiente en repetidas ocasiones si bien lo hace con poco convencimiento. Enseguida, como si ni siquiera le hubiera estado escuchando, de su boca sale otra tema bien distinto:
-Así que el enano les enviaba unas grabaciones de su casa, realmente inquietante.
-Por no hablar del hecho de que estaba al mismo tiempo en la fiesta así como en la casa.
Los oídos de François permanecen cerrados desde el instante en que comenzó a reflexionar sobre las cintas. Prosigue:
-Un desconocido, de altura por debajo de la media, se dedica a grabar vídeos de una pareja para luego enviárselos por correo. Guau. Es genial. ¿Recuerdas el guión que debo presentar a la TV5 y para el que no tengo absolutamente nada?
Las intervenciones de Frédéric se suceden con la misma facilidad con que François las ignora. Pero su último inciso, por algún motivo, sí ha sido escuchado por su buen amigo François, a lo que éste contesta:
-Pues deberías homenajear al autor de esta cinta de alguna forma, ya que va a salvar tu culo franchute. Podrías escribir un final que dejara la misma sensación que producen sus películas, ¿no te parece?
-Bonjour Frédéric, comment ça va?
-Dame un segundo que coja la chaqueta y bajamos al videoclub.
-Ya he pasado yo de camino. He alquilado una película americana.
-¿Y eso? Detesto el cine americano. Y a los americanos, ¡qué demonios! (dice Frédéric entre risas)
-No podría estar más de acuerdo, sin embargo ésta no es del director americano al uso, tranquilo.
-Muy bien, pues rebobina la cinta mientras preparo una tortilla.
Transcurridos cinco minutos vuelven a reunirse en el salón frente a la televisión. Frédéric ejerce de maestro de ceremonias y procede a pulsar el internacional botón de "play".
-"Caguetega pegdida"... "Integuersante" secuencia inicial...
Dos hogas, perdón, dos horas después, comienzan a desfilar los títulos de crédito.
-Emmm...
Una vez la cinta ha terminado del todo, se ponen en marcha. Recogen la mesa, friegan los platos, sacan a pasear al perro e incluso al gato, y justo cuando los primeros rayos de sol del nuevo día asoman, Frédéric rompe el silencio que mantenían desde que finalizara la película.
-Así que el tipo aquel entra en la celda y luego...
François asiente en repetidas ocasiones si bien lo hace con poco convencimiento. Enseguida, como si ni siquiera le hubiera estado escuchando, de su boca sale otra tema bien distinto:
-Así que el enano les enviaba unas grabaciones de su casa, realmente inquietante.
-Por no hablar del hecho de que estaba al mismo tiempo en la fiesta así como en la casa.
Los oídos de François permanecen cerrados desde el instante en que comenzó a reflexionar sobre las cintas. Prosigue:
-Un desconocido, de altura por debajo de la media, se dedica a grabar vídeos de una pareja para luego enviárselos por correo. Guau. Es genial. ¿Recuerdas el guión que debo presentar a la TV5 y para el que no tengo absolutamente nada?
Las intervenciones de Frédéric se suceden con la misma facilidad con que François las ignora. Pero su último inciso, por algún motivo, sí ha sido escuchado por su buen amigo François, a lo que éste contesta:
-Pues deberías homenajear al autor de esta cinta de alguna forma, ya que va a salvar tu culo franchute. Podrías escribir un final que dejara la misma sensación que producen sus películas, ¿no te parece?
Caché @ IMDb
6.8
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