Borat (2006)
Descubrí a este personaje por casualidad cuando yo vivía en Inglaterra, país originario de Sacha Baron Cohen. Era en el programa Da Ali G Show, cuyo sentido del humor no iba conmigo. Sin embargo, había un pequeño espacio casi al final del programa, donde un personaje kazajo hacía de las suyas. Se dedicaba a poner en situaciones comprometidas a inocentes americanos que creían ser más listos que él, mientras Borat sacaba a relucir todas sus vergüenzas. O mejor dicho, servía de vehículo para que ellos mismos las sacaran a la luz. Durante esos cinco minutos que duraba su sección, la expresión seria que había lucido mi cara durante el resto del programa se convertía en una amplia sonrisa que incluso se tornaba en carcajada.
Lo curioso del tema es que por aquel entonces, mi compañero de piso y yo nos preguntábamos cómo era posible que aquel personaje que disponía de un espacio tan mínimo en el programa fuera de hecho más gracioso que el protagonista del mismo. No sería hasta tiempo después que descubriría que aquel simpático e ingenioso kazajo y el rapero que daba nombre al show eran la misma persona.
En Borat: Cultural Learnings of America for Make Benefit Glorious Nation of Kazakhstan (éste es, nada más y nada menos, el título de la película) podemos encontrarnos ante el enésimo caso dónde los árboles podrían no dejarnos ver el bosque. En esta descarada comedia el humor no proviene principalmente de Borat, sino de las reacciones de los estadounidenses ante sus acciones y palabras. Es cierto que en ese sentido se podría parecer a los documentales de Michael Moore, dónde la verdad es mostrada en parte, pues es más que evidente que ha habido una selección. Algo más que lógico porque se trata de una comedia y no de un documental. A diferencia de en el caso de Michael Moore, aquí no presume de lo segundo cuando tal vez pudiera incluso serlo.
Dejando éste último punto bien claro, y asumiendo que los segmentos están seleccionados probablemente entre muchas horas de grabación, el hecho de que existen esos personajes es más que cierto. Borat muestra una amplia galería de personas que encarnan los defectos que el pueblo americano apenas puede ocultar: homofobia, fanatismo religioso, xenofobia, misoginia, jóvenes echados a perder...
Estaríamos ante un grave error si juzgáramos a todo el país por lo que esta cinta muestra. Todos esos estereotipos, que ciertamente se dan, sólo responden a un pequeño porcentaje de la población. La realidad no se corresponde a buen seguro con la media que resulta en la película. Y es que si por algo se caracteriza el pueblo estadounidense es por los enormes contrastes. Por un cada uno de los defectos recogidos, podría citarse al menos una virtud.
Todo un estudio sociológico, sin base científica eso sí, oculto bajo la apariencia de una "road movie" grosera, irreverente y escatológica a más no poder. Reflejo de una sociedad capaz de extraordinarios logros así como de imperdonables atrocidades.
Sacha Baron Cohen recibiendo el Globo de Oro @ YouTube
Fragmento "aterrador" en una iglesia creacionista @ YouTube
In My Country There Is Problem @ YouTube
Borat @ IMDb
Lo curioso del tema es que por aquel entonces, mi compañero de piso y yo nos preguntábamos cómo era posible que aquel personaje que disponía de un espacio tan mínimo en el programa fuera de hecho más gracioso que el protagonista del mismo. No sería hasta tiempo después que descubriría que aquel simpático e ingenioso kazajo y el rapero que daba nombre al show eran la misma persona.
En Borat: Cultural Learnings of America for Make Benefit Glorious Nation of Kazakhstan (éste es, nada más y nada menos, el título de la película) podemos encontrarnos ante el enésimo caso dónde los árboles podrían no dejarnos ver el bosque. En esta descarada comedia el humor no proviene principalmente de Borat, sino de las reacciones de los estadounidenses ante sus acciones y palabras. Es cierto que en ese sentido se podría parecer a los documentales de Michael Moore, dónde la verdad es mostrada en parte, pues es más que evidente que ha habido una selección. Algo más que lógico porque se trata de una comedia y no de un documental. A diferencia de en el caso de Michael Moore, aquí no presume de lo segundo cuando tal vez pudiera incluso serlo.
Dejando éste último punto bien claro, y asumiendo que los segmentos están seleccionados probablemente entre muchas horas de grabación, el hecho de que existen esos personajes es más que cierto. Borat muestra una amplia galería de personas que encarnan los defectos que el pueblo americano apenas puede ocultar: homofobia, fanatismo religioso, xenofobia, misoginia, jóvenes echados a perder...
Estaríamos ante un grave error si juzgáramos a todo el país por lo que esta cinta muestra. Todos esos estereotipos, que ciertamente se dan, sólo responden a un pequeño porcentaje de la población. La realidad no se corresponde a buen seguro con la media que resulta en la película. Y es que si por algo se caracteriza el pueblo estadounidense es por los enormes contrastes. Por un cada uno de los defectos recogidos, podría citarse al menos una virtud.
Todo un estudio sociológico, sin base científica eso sí, oculto bajo la apariencia de una "road movie" grosera, irreverente y escatológica a más no poder. Reflejo de una sociedad capaz de extraordinarios logros así como de imperdonables atrocidades.
Sacha Baron Cohen recibiendo el Globo de Oro @ YouTube
Fragmento "aterrador" en una iglesia creacionista @ YouTube
In My Country There Is Problem @ YouTube
Borat @ IMDb
7.0
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